domingo, 7 de abril de 2024

El mercado por si solo no podrá dar de comer al semillero de pobres que creó el kirchnerismo.

 

Mijail Bakunin, en el siglo XIX creo el concepto de “lumpen proletariat”, el individuo de clase baja, iletrado, fanático y maleable, que los teóricos marxistas definían como “materia prima” de la revolución. El “hombre masa” utilizado por los “políticos iluminados” para llegar al poder, para luego ser descartados. En la definición de un argentino un poco atorrante un FORRO.

El kirchnerismo usó y abusó de este concepto, creando semilleros de pobres en distintos lugares de nuestra Patria, utilizando a nuestras clases más desfavorecidas e incluso importando muchos de países limítrofes “nuestros hermanos latinoamericanos”.

Con esta materia prima humana creó bolsones iletrados de pobreza cuya misión fue colocar y mantener en el poder a los políticos kirchneristas.

Las condiciones para que este “pueblo” pueda cumplir su misión fueron:

Fanatismo: debían ser seguidores incondicionales de un líder y luego de una líder, independientemente de las pruebas irrefutables de corrupción que demuestren. No importa “roban, pero reparten”.

Escaso nivel cultural: La cultura lleva a pensar y el lumpen no debe pensar, debe repetir “slogans” como ser “aguante cristina”, “aparición con vida de Santiago Maldonado”, “fueron 30000”, etc.

Total dependencia del estado: Mejor dicho, del gobierno kirchnerista, estrategia construida durante más de dos décadas mediante la distribución discrecional de dádivas a los lumpenes, unida a una propaganda permanente alegando una “justicia social”, pidiendo a cambio “militancia”. “Lo que a vos te falta es porque lo tiene aquel”, generando envidia, resentimiento y lo que es peor el convencimiento entre los lumpenes que no vale la pena buscar el progreso mediante el esfuerzo, que la culpa de todo la tiene la injusticia social que lo estancó en la pobreza.

Esto trajo como consecuencia que al menos una generación (tal vez dos) se hayan convertido en parásitos sociales, que están convencidos que necesitan un estado que los mantenga con los impuestos extraídos de los que trabajan.

Según estimaciones estamos hablando que estos lumpenes son aproximadamente un 25 % de la población, cuyas edades oscilan entre los 20 y 50 años, es decir plena edad económicamente activa, pero que por razones de falta de formación, motivación y ganas NO SIRVEN PARA NADA.

El plan económico del gobierno de Milei (al cuál yo voté y fiscalicé) está centrado en sanear la economía, eliminando la inflación, atacando la corrupción, terminando con los privilegios (empresariales, culturales, sindicales y políticos), para así crear las condiciones que favorezcan la inserción de la Argentina en la economía occidental, atraer inversiones y de esta manera crear fuentes de trabajo que impulsen el desarrollo.

En este momento estamos en la mitad del río, el gobierno ha demostrado un empuje y coraje que ha desorientado a la oposición kirchnerista, yo en lo personal creo que llegaremos a la otra orilla, como expresara en mi artículo anterior de este blog “Una sana dosis de locura”, pero tenemos que estar preparados a que, en el mejor de los casos, tengamos que seguir lidiando con una cuarta parte de la población improductiva que habrá que seguir manteniendo con nuestros impuestos, si no queremos terminar en una guerra civil.

En la década del 80 del pasado siglo yo me desempeñaba como ejecutivo de una importante empresa internacional. En esa época uno de los “gurúes” empresariales era Peter Drucker y mis jefes me habían enviado a una de sus conferencias dada en el hotel Sheraton. En ella dijo una frase que me impactó:

Ustedes en Argentina tienen la llamada “mano de obra barata” y a eso lo consideran una ventaja, un activo para las inversiones, pero en un futuro no muy lejano la tecnología hará que eso sea una carga, un pasivo, dado por la población no capacitada que tendrán que mantener para conservar la paz social.

Si no hubiera existido el kirchnerismo igual tendríamos que lidiar con la población económicamente activa a la que la tecnología deja fuera del mercado laboral. Si a eso le agregamos que dos décadas de populismo crearon una masa del 25 % que incluso no sirve para nada, estamos en un problema al que en mi modesta opinión la “mano invisible del mercado” no le podrá dar solución.

No olvidemos que cuatro años pasan pronto y si la situación no cambia esa gente, esa masa de “lumpens proletariat”, no votaran a la LLA y lo más probable es que vuelva el populismo en alguna de sus formas.

Por lo antedicho es fundamental la tarea del Ministerio de Capital Humano que en cuatro años deberá:

Expulsar a sus países de origen a los extranjeros que viven de la asistencia estatal.

Capacitar a los ciudadanos argentinos que hoy viven de planes sociales para que puedan ser absorbidos por el mercado laboral.

Cambiar la cultura del asistencialismo estatal por la del mérito y el esfuerzo.

No será fácil, pero lo importante es ser conscientes del problema, es el primer paso para buscar una solución.

                                                                     Jorge Melchor Greco

                                                                  El Foyel, 7 de abril de 2024

 

 

jueves, 31 de agosto de 2023

Una sana dosis de locura.

 

La política argentina ha sufrido con las últimas PASO un impacto que sorprendió a analistas, encuestadores, periodistas y políticos. Ninguno de ellos pudo predecir el triunfo electoral de Milei (no de La Libertad Avanza). Digo esto porque la gente votó al candidato y no al partido. Este último es un bebé o mejor dicho un infante que tiene no más de tres años de edad.

La gente votó a Milei y no se sorprendió por el resultado, el votante sentía en las tripas que eso pasaría. Fue algo que se palpaba en el aire, lo votaron los ricos, los pobres, los que tenían cultura política y los que no. Milei encarnó el hartazgo de una sociedad que ya no cree en los políticos, muchos tampoco en el sistema que demostró con datos objetivos sus limitaciones (ver en este blog el artículo “En la Argentina la Democracia Fracasó”).

Milei identificó una nueva grieta, la formada por “la casta” integrada por los que se benefician con el estado y el resto de la población que sufre las consecuencias. Los primeros son los que se beneficiaron con el sistema político vigente, los segundos los que lo sufren. Los primeros son multimillonarios, los otros en su mayoría son pobres.

Según Milei la casta esta formada por los políticos corruptos, los empresarios que viven de los negociados con el estado, a quienes llama los “empresaurios”, los periodistas que son agentes de propaganda del statu quo y que no buscan cumplir la misión de informar sino la de “formar opinión”, en base al libreto que les bajan de arriba. También, la integran los economistas que le dan una pátina de “profesionalismo” a los postulados de la casta y por último los sindicalistas millonarios que traicionan a sus trabajadores que son pobres.

Este discurso maniqueo caló en la gente de todas las clases sociales y nivel cultural, que vio reflejado en su simplicidad la esencia de su sentimiento frente a los políticos, un nuevo “que se vayan todos”. El votante de las PASO sintió que Milei les decía la verdad, no tenía “coaching”, carecía de asesores de imagen, nadie le escribía los discursos y le indicaba lo que era “políticamente correcto” y lo que no lo era. Eso lo hizo creíble para el electorado y sus postulados potentes y agresivos fueron corriendo todo el discurso de la clase política hacia la derecha. Antes de Milei ningún candidato se animaba a definirse como “de derecha”, a lo sumo se ubicaban en el “centro” del espectro.

Contra todo pronóstico de las encuestas Milei ganó las PASO y eso provocó que “la casta tenga miedo”, como cantan los seguidores de La Libertad Avanza en los actos.

Si Milei cumple con lo que promete los miembros de esta parte de la grieta la van a pasar mal, si hace el ajuste en el estado, como eliminar ministerios, acabar con la corrupción en la obra pública, terminar con los intermediarios en los planes sociales, modificar el sistema de salud, acabar con los “asesores” en el congreso, etc, se acabarán los negociados de muchos. Los medios no tendrán “pauta oficial”, los empresarios no tendrán licitaciones amañadas, los sindicalistas no recibirán las cuotas para obra social de sus afiliados.

Frente a esto se lanza el contrataque, “Milei esta loco”, habla y duerme con sus perros, se acuesta con su hermana, no se lleva bien con sus padres, etc. Todos cuestionamientos que si fueran ciertos nada tendrían que ver para la elección de un candidato a presidente. Los periodistas “ensobrados” lo atacan desde todos los frentes, “quiere vender órganos”, “busca la libre portación de armas”, “quiere acabar con el Banco Central”. Cuando comparamos estos cuestionamientos frente a los verdaderos problemas de una sociedad donde 6 de cada chico no come correctamente y el 50 % de la población es pobre, suena a hueco. La gente se da cuenta de que el sistema político no entiende sus verdaderos problemas.

Por eso vota a Milei, a pesar de que publiquen un libro como “El Loco”, donde un pseudo periodista desconocido hace una síntesis de sus “locuras”. A la gente no le importa y lo votan igual.

Frente a esto muchos políticos de “la casta” tratan de arrimársele, Barrionuevo es un ejemplo “va a ganar en primera vuelta”, muchos gobernadores coquetean con él, conscientes de que necesitaran de las transferencias discrecionales que amenaza en cortar, sino no podrán pagar a sus empleados públicos, la Argentina no es Federal, es Unitaria, porque la mayoría de las provincias viven de la plata que le giran desde el gobierno central.

Fracasados todos estos argumentos desde la oposición tanto de Juntos por el Cambio como de Unidos por la Patria, me encantan los nombres, el “cambio” lo encarna Milei y la Patria según lo entienden los K es CFK. En fin, agotados los ataques desde C5N, TN y LN+ ahora ensayan una nueva estrategia.

NO TIENE GOBERNADORES, NO TIENE EQUIPOS, NO TIENE EXPERIENCIA DE GOBIERNO. NO VA A TENER GOBERNABILIDAD

Ahora bien, vamos punto por punto:

Gobernadores: cuando los tiburones huelen sangre se abalanzan sobre el herido, en este caso la víctima es CFK, Milei ganó en las PASO entre otras cosas porque 14 gobernadores adelantaron las elecciones provinciales para no quedar pegados al fracaso nacional del kirchnerismo. Ellos saben que necesitan del gobierno central, si gana Milei los tendrá agarrados de las pelotas con los adelantos discrecionales de la coparticipación.

Equipos: los colaboradores de Milei son un lujo, Diana Mondino, Berthie Benegas Lynch, un equipo de economistas de primer orden, una vicepresidenta como Villarruel que puede alinear a las FFAA y FFSS para enfrentar a los que quieran tomar la calle, periodistas como Pagano, candidatas queribles como Piparo, etc. Pudo presentar un plan de gobierno que ataca punto por punto la problemática nacional y que se extiende en el tiempo constituyendo una verdadera Política de Estado. Si miramos a la oposición no les llega a sus talones. ¿Quién entonces tiene más posibilidades de Gobernar?

No tiene experiencia de gobierno: Pero tiene experiencia de como manejarse en la actividad privada, no confundir experiencia de gobierno con “rosca”, son dos cosas distintas y no olvidar que si se repiten los resultados de las PASO nadie tendrá mayoría en el Congreso y muchos vendrán al pie, que es el gobierno central.

Gobernabilidad: Mi película preferida es El Padrino, para quienes la vieron recordaran que Don Corleone, frente a la negativa de Jack Woltz (el director de cine) de darle el papel a Johnny Fontane, le pregunta a su negociador Tom Hagen si éste era “un siciliano”. Hagen se queda reflexionando porque quería entender la pregunta de su “Don”-

-¿Usted pregunta Padrino, si Woltz es alguien capaz de arriesgarlo todo por un ideal,- por una posición, por enfrentar a un enemigo poderoso?

- Si.

- No, Woltz no lo es.

- Entonces sigamos adelante.

Yo creo que Milei SI es un siciliano, tiene una SANA DOSIS DE LOCURA y eso es lo que lo hace tan peligroso para la casta.

 

                                                                          El Foyel, 31 de agosto de 2023.

 

 

 

 

 

viernes, 3 de febrero de 2023

¿Ni una menos?

 

Cuando los movimientos feministas comenzaron con la primera marcha denominada « ni una menos » había un femicidio por semana, al día de hoy esta cifra creció a una víctima por día.

 

Parecería que la “movida”, como la llaman estas organizaciones, no fue muy exitosa.

 

En la marcha de hoy reclamarán por los asesinatos de mujeres, la violencia “machista”, la liberación de una lesbiana presa porque mato a un tipo que la quiso violar, la libertad de Milagros Sala, la violencia doméstica, la igualdad laboral, contra el acoso callejero, la igualdad de oportunidades dentro de los partidos políticos, el aborto gratuito y seguro y algunas otras cosas que se me han escapado.

 

¿Es mucho y muy mezclado no?

 

Entre las que organizan la marcha también encontramos bastante heterogeneidad, desde “movileras” de TN y Radio Continental hasta dirigentes de organizaciones de lesbianas, las primeras a mi entender en busca de un poco de fama y la oportunidad de crecer dentro de los medios de comunicación, parece que esto si les funcionó porque estas chicas ahora tienen un programa radial los domingos en Radio Nacional.

 

Me parece que el verdadero problema o mejor dicho los problemas no son identificados, incluso no está claro contra quien hacen la marcha, si es contra el gobierno, la justicia, los violentos o contra los hombres en general.

 

Tampoco queda claro que es lo que piden.

 

¿Que aumenten las penas contra los que matan mujeres?

 

Con esto estoy de acuerdo, pero a mi entender hay que diferenciar los casos, no es lo mismo el violador que luego asesina y se escapa porque quiere eludir al castigo o  el marido engañado que en un ataque de furia asesina mata a su mujer, a su amante y luego se suicida. A este último no creo que lo haga desistir en su decisión de asesinar el hecho de amenazarlo con una pena mayor.

 

También tendrían que preguntarse las organizadoras de esta movida si con la difusión de los casos no están echando leña al fuego, recordemos a aquel baterista de un conjunto de rock que asesinó a su mujer rociándola con nafta y luego prendiéndola fuego. La amplia mediatización sensacionalista del caso desató una seguidilla de hechos similares durante un tiempo considerable.

 

Cuando escuchamos los programas “feministas” percibimos una agresión hacia los hombres en general, no solo contra los violentos.

 

Yo no creo que estas actitudes ayuden mucho a reducir la violencia de género, por el contrario creo que hace que los violentos se pongan más violentos.

 

 Muchas de estas mujeres son lesbianas y se les nota su aversión hacia los hombres, un ejemplo de esto es que la marcha la promocionan como “contra la violencia machista”. El término “machista” fue acuñado precisamente por las lesbianas y conlleva una carga de odio y envidia hacia los hombres.

 

Es importante que las organizadoras comprendan que la sociedad está formada por mujeres y tambien por hombres que deben vivir en armonía y no en confrontación. A mi entender sería mucho mejor que hubieran promocionado la marcha en “contra la violencia de género”.

 

Yo me considero muy “macho” justamente porque jamás le pegué a una mujer, un gusano que es violento contra las mujeres es cualquier cosa menos “macho” y eso es lo que tienen que puntualizar si quieren atacar el problema.

                                                                                                

En cuanto a la utilización del tema para fines personales y/o políticos por parte de las organizadoras me parece realmente una bajeza. Tomar algo tan dramático y usarlo para beneficio propio es inmoral.

 

¿Cuál es la solución?

 

No lo sé, el tema es muy complejo, el patriarcado tiene raíces ancestrales y el hombre desde que tenemos memoria consideró a la esposa “su” mujer. Cuando un hombre presenta a su compañera a alguien dice “mi mujer”, “mi novia”, etc., en tanto que son pocas las mujeres que dicen “mi marido” sino simplemente dicen el nombre de pila del compañero en cuestión.

                                                                        

Basta con analizar la letra de muchos tangos o piezas folclóricas donde el hombre lava su “honor” con la sangre de la infiel y a veces también, aunque no siempre con la de su rival en el amor.

 

Es cultural, es ancestral, en Japón, por ejemplo, las mujeres le piden permiso a su marido para ir a llorar a su habitación cuando el hombre les hizo algo que las lastimó.

 

Ahora bien hay que diferenciar estos hechos “pasionales” de los simples asesinatos producto de violaciones u otros actos aberrantes. Son de otra naturaleza y hay que tratarlos con todo rigor, se corresponden con el problema general de lucha contra la delincuencia y los hechos de inseguridad que ya tratamos en otro trabajo.

 

En el caso de la violencia doméstica con el violento que le pega sistemáticamente y por deporte a su compañera, haciéndole la vida imposible a ella y a sus hijos, creo que hay que actuar diferente, simplemente hay que “cagarlo a trompadas”. Yo considero  que el que le pega a una mujer es un cobarde que en la mayoría de los casos no haría lo mismo con alguien de su mismo sexo.

 

A mi entender en lugar de atacar a los hombres en general las afectadas tendrían que “aliarse” con aquellos que felizmente son mayoría y que nunca le han pegado a una mujer.

 

Deberían atacar la imagen del violento precisamente desde su “falta de machismo”, hacer campañas mostrando al femicida como un cobarde y no como alguien que ha defendido su “honor”.

 

Insistir en que los otros hombres las defiendan, sean parientes, amigos o miembros de las fuerzas de seguridad. En esto último el Estado debe asegurarse que las policías cumplan con su deber y reciban las denuncias de las mujeres golpeadas.

 

Instalar la condena social del femicida con campañas no agresivas, un mensaje agresivo solo consigue exacerbar al violento.

 

En definitiva hacer que esta no sea una lucha de las mujeres, sacarle a la misma la bandera de “feminista” y hacer que sea una accion de la sociedad en su conjunto, con todos los hombres y mujeres de buena voluntad.

 

 

 

Jorge Melchor Greco

El Foyel 01.06.17

 

 

 

jueves, 3 de noviembre de 2022

Lo importante es la igualdad de oportunidades, no la igualdad a secas.

 

El progresismo dice buscar la igualdad entre los hombres.

En aquellos países donde se implantó el comunismo esto fue logrado, aunque parcialmente. Por un lado, se constituyó una clase dirigente dominante (los miembros del gobierno y del partido único) con privilegios tanto económicos como sociales y por el otro una masa igualitaria, sumida en la pobreza y sin libertades.

La Derecha no busca la igualdad entre los hombres, busca que todos los hombres tengan la misma oportunidad de desarrollarse en base a su mérito y esfuerzo.

La izquierda opone a estos argumentos el hecho de que existen individuos que, por haber nacido en “cuna de oro”, tienen asegurado su futuro, aunque no hagan ningún esfuerzo o mérito alguno.

Esto no es verdad. La historia nos demuestra que si los que heredan una fortuna no se esfuerzan por mantenerla no tardan en perderla.

Por otra parte, en los países donde se privilegia el esfuerzo y el mérito se dan incontables casos de self made men que partiendo de hogares humildes progresaron y tuvieron, como diría un sociólogo, una movilidad social ascendente.

Hasta antes del advenimiento de la democracia en 1983, la Argentina permitía, mediante el estudio de una carrera o el emprendimiento de un negocio, el progreso económico y la movilidad social, a condición de esforzarse y perseverar.

Lamentablemente el avance de discursos de izquierda poco a poco fue limando esa posibilidad, reemplazando la igualdad de oportunidades por la igualdad a secas.

Por ejemplo, podemos comenzar por la educación, hubo un ataque sistemático para reducir la calidad educativa. Con la excusa de la igualdad y la no estigmatización, se fue eliminando poco a poco la importancia del mérito en los alumnos, hasta llegar al extremo de la prohibición de repetir de grado o el abandono de temas “difíciles” para evitar que los alumnos fracasen. Resultado, hoy los adolescentes salen de la secundaria sin saber que es una regla de tres simple o como comprender y resumir un texto leído.

Eso sí, son todos iguales en su ignorancia.

El caso de las universidades fue más dramático, aparecieron durante el período kirchnerista facultades en muchos municipios, especialmente en el conurbano bonaerense, que no eran mas que centros de adoctrinamiento.

En las facultades tradicionales como la UBA, la UNLP, la UNC, etc., se abandonó la excelencia educativa, se eliminaron los exámenes de ingreso y las limitaciones en la cantidad de “bochazos” para continuar con las carreras. Resultado salen profesionales con un nivel mucho mas bajo que los que egresaban hasta la década del 70 del pasado siglo.

En esa época los profesionales argentinos eran requeridos en el exterior y muchos, entre los que me incluyo, pudimos aprovechar esa oportunidad y desarrollarnos en una carrera internacional.

Hoy nuestros profesionales jóvenes, que emigran buscando un futuro que la Argentina les niega, terminan aceptando cualquier trabajo para sobrevivir, muy por debajo de lo que, en teoría, su capacitación les permitiría aspirar.

En el ámbito de los negocios la situación fue similar, con el agravante de que quienes pudieron desarrollar una empresa en la década del 70 poco a poco la fueron perdiendo a causa de la presión impositiva y laboral. Hoy es prácticamente imposible desarrollar una actividad, sin caer en la ilegalidad de la evasión impositiva (en defensa propia) o la contratación de personal en “negro”.

Eso también se lo debemos a las políticas de izquierda de “igualdad”, lograron con los sindicatos que los trabajadores estén igualados en la falta de empleo en blanco, mientras los sindicalistas se enriquecieron, emulando a las élites de los países comunistas con dirigentes millonarios y obreros en la pobreza.

La presión impositiva esta originada en el desastre del manejo del gasto público, dilapidado en políticas de asistencialismo demagógico y aumento del empleo estatal para así asegurar un “conchabo a los militantes”, a lo que debemos agregar los hechos de corrupción.

La “política de igualdad” de la izquierda nos a llevado a que tengamos más del 50 % de pobreza y que 7 de cada 10 niños en el conurbano no hagan las cuatro comidas al día.

Aunque también tenemos una clase política (todos, no solo los K) que viven rodeados de privilegios.

Como decía George Orwell en su libro Rebelión en la Granja, los animales somos todos iguales, pero algunos son más iguales que otros.

 

                                                                           Jorge Melchor Greco

                                                             El Foyel, Patagonia Argentina, 03.11.22

martes, 23 de agosto de 2022

El kirchnerismo no es peronismo sino comunismo cubano. (Artículo escrito en el 2017, la política circular argentina hace que vuelva a tener vigencia, ahora que CFK quiere refugiarse en el peronismo para que la defienda).

 

¿Notaron que Cristina nunca nombra a Perón?

Esto es así porque el General echó a los Montoneros de la Plaza de Mayo acusándolos de imberbes e idiotas durante el acto del primero de mayo de 1974.

Los dirigentes del partido comunista de la URSS y de su satélite cubano, durante la década del 70 comprendieron que nunca llegarían a las masas obreras en Argentina mientras existiera el peronismo, por lo tanto cambiaron de estrategia, en lugar de competir con él decidieron infiltrarlo.

Esa acción la hicieron antes de la vuelta de Juan Domingo Perón, cuando éste se encontraba exiliado en España y uno de los emisarios fue Hector J. Campora.

El general en su maquiavélica estrategia política consideró útil usar a los “jóvenes de izquierda” que Cámpora le proponía, para facilitar su vuelta y sobre todo mediante ellos captar el apoyo de las juventudes universitarias que en su mayoría eran de izquierda (en todas sus versiones, socialistas, comunistas, trotskistas, etc.).

Los que asistimos a las diferentes facultades a principios de los 70 hemos podido ver filmes clandestinos (no existían aun los videos) donde Perón daba clases de “insurrección armada” explicando la organización en células, tácticas guerrilleras y otras menudencias.

Cuando finalmente regresó a la Argentina asistimos a la “masacre de Ezeiza” porque en ese momento la derecha peronista (Osinde, Norma Kenedy y otros) ya le habían advertido a Perón del alto nivel de penetración comunista que tenía el movimiento justicialista, de la mano del hasta ese momento su hombre de confianza (Hector J; Campora).

Allí el general indignado “dejo hacer” y los muchachos de la derecha decidieron dar un escarmiento a los “zurdos” y tuvimos a los muertos de Ezeiza.

La cosa no quedó ahí y los muchachos de izquierda decidieron iniciar la lucha armada y aparecieron los distintos grupos guerrilleros de signo “peronista”, las FAP (Fuerzas Armadas Peronistas) y sobre todo los Montoneros. Las consignas eran por un “socialismo nacional”. Se enfrentaron a la derecha peronista antes mencionada y sobre todo a la “burocracia sindical” a la que acusaban de ser los responsables de la pérdida del apoyo del general hacia su visión de izquierda.

Como eran jóvenes y leían poca historia no cayeron en la cuenta que Perón siempre fue de derecha con una gran admiración por el fascismo y el nazismo. No olvidemos que al final de sus días y cuando necesitaba tener siempre cerca de sí a un equipo de médicos, dio órdenes estrictas de “no tener a ningún judío” entre ellos.

Finalmente los grupos armados de la izquierda peronista se unieron bajo el nombre de Montoneros y entre otros cometieron el asesinato de Rucci, esto último al poco tiempo del regreso de Perón.

Este acto de desafío al general hizo que éste definitivamente les declarara la guerra, echándolos de la plaza y organizando la represión mediante la triple A y las fuerzas armadas que todavía estaban subordinadas al orden democrático. Los Montoneros le respondieron pasando a la clandestinidad y alejándose definitivamente de Perón, reivindicando la figura de Evita en su posición de izquierda que como estaba muerta no podía negarla, con el slogan “si Evita viviera seria Montonera” pintado en las paredes de todas las facultades.

Esto es histórico ahora si nos acercamos más a nuestros días vemos que todos estos guerrilleros sobrevivientes (Abal Medina, Firmenich, Vaca Narvaja y otros) anduvieron de capa caída hasta la llegada de Néstor Kirchner al poder. Antes habían pasado por diferentes situaciones de riesgo, primero tuvieron que huir cobardemente durante la dictadura militar dejando a sus idiotas útiles como “carne de picana” mientras ellos se refugiaban en el exterior (principalmente en Cuba donde incluso depositaron millones de dólares producto del secuestro de los Born). Luego con la vuelta de la democracia tuvieron que enfrentar juicios por sus crímenes (doctrina de los dos demonios) cuando durante el gobierno de Alfonsín que juzgó a los militares también los juzgó a ellos por los crímenes cometidos (asesinatos de empresarios, intelectuales, sindicalistas, militares, policias y políticos).

Finalmente hubo el indulto de Menem a ambos sectores y se mantuvieron con un perfil bajo y vergonzante hasta la llegada de Néstor.

El tuerto vio la oportunidad que tenia para aumentar su escaso poder inicial en el hecho de volver a captar a la izquierda y así lo hizo, volviendo a infiltrar el movimiento justicialista con zurdos, mas comunistas que nunca. Nótese que precisamente la organización que les servía de interlocutora fue denominada “La Campora” comandada por su hijo Máximo (cuando no estaba con la play station).

Durante su gobierno primero y con el de CFK luego asistimos al apoyo incondicional que las organizaciones de izquierda patrocinadas por Cuba (CELS, Madres, Perez Esquivel, APDH, etc) le dieron para así conseguir lo que no habían logrado antes, es decir transformar al peronismo en comunismo.

Lo lograron, al día de hoy basta ver cuál es su posición en la política internacional y veremos que coincide exactamente con la visión comunista de América latina. Apoyo a Venezuela, alineamiento con Bolivia y Ecuador y un combate encarnizado con las democracias liberales de América (Chile, Colombia, Peru, Paraguay y el Brasil post Dilma).

Yo los invito a escuchar a los periodistas “kirchneristas” que aún quedan en Radio Nacional (Mario Weinfeld, Aliberti, Anguita, Mona Moncalvillo) y verán como todos siguen repitiendo los argumentos que les bajan desde Cuba. Por ejemplo ahora tratar de defender la indefendible posición de Maduro y los militares de Venezuela.

En este momento CFK con la fundación de su “unión ciudadana” terminó de confirmar su ruptura con el peronismo, solo falta que se saque la careta y se pase a llamar de una vez por todas “comunista”.

Para los que piensen que esto no puede ser así porque la equina está podrida en la guita que se afanó no se olviden que esta manera de actuar es la base de la “estrategia revolucionaria” de todo líder comunista, usar al pueblo para encaramarse en el poder, procurar nunca tener que dejarlo, enriquecerse robando, llevar sus dirigentes una vida de privilegios (Stalin, Castro, Mao, Maduro) porque ellos son los elegidos. Mientras su pueblo queda sumido en la miseria más abyecta por culpa del “imperialismo capitalista extranjero que les impide desarrollarse”.

Si esta equina corrupta regresa al poder esta vez no lo va a soltar más y la Argentina, será como Cuba o Venezuela.

Basta que observemos como la juventud venezolana huye de su país para tener una visión del futuro de nuestros hijos y nietos si esto llega a suceder.

A nosotros los ciudadanos de bien de impedirlo.

 

 

                                                                Jorge Melchor Greco

                                                                  El Foyel, 05.08.17

 

 

lunes, 22 de agosto de 2022

Un país de pelotudos. (Este artículo lo escribí en 2017, pero dada la proximidad del mundial tiene plena vigencia).

 

No sé si saben pero los términos « pelotudo » y « boludo » ambos son argentinos y no se usan en ningún otro país de habla hispana.

Según la historia parece que estos calificativos nacieron durante la guerra de la independencia cuando las tropas patriotas usaban armamento muy sofisticado como siempre en Argentina (lanzas de caña tacuara, cuchillos hechos como se podía y sables que provenían de algún enemigo), las armas de fuego eran casi inexistentes y como tirar flechas quedaba feo parece que las únicas armas con las que contaban para tirar a distancia eran las “bolas” es decir las boleadoras de origen indígena que podían ser de dos elementos o de tres.

Cuando esta arma tan sofisticada tenía una sola bola ésta era más grande y se la llamaba “pelota” tal vez porque su tamaño era similar al que se usaba en el juego de pelota que también era de origen indígena (azteca para ser preciso).

Ahora bien en el ejercito patriota parece que las primeras líneas que tenían que oponerse al ataque del enemigo (que si tenía armas de fuego) estaba formada por los “boludos” y los “pelotudos”, que tenían como misión lanzar sus “bolas” y “pelotas”  y tratar de pararlos antes que llegaran al cuerpo a cuerpo.

Obviamente estas tropas tenían gran número de bajas, como todas las primeras líneas en las guerras de la historia, y cuando los oficiales trataban de conseguir voluntarios para ellas no conseguían mucha adhesión. Por eso iban generalmente los castigados o los incautos, de allí el nacimiento de los términos “boludo” y “pelotudo” para estos individuos.

Esto es histórico, si no me creen búsquenlo en Internet.

En el siglo 21 los argentinos no usamos boleadoras ni pelotas para pelear pero si contamos con un pueblo que mantiene una relación “pasional” con la pelota, los fanáticos del futbol, los pelotudos de la actualidad.

Durante el periodo KK se inventó el “futbol para todos” versión del tercer milenio del “pan y circo” de Nerón, que permitía a la vez poder afanar tanto por parte del gobierno como de los dirigentes de la AFA y de los clubes. Mientras los pelotudos disfrutaban de su pasión (¿gratis?).

Considerando el amor argentino por la pelota también usaban los partidos de futbol para tapar los programas de Lanata metiéndolos a las diez de la noche, eso funcionaba porque muchos que no compartían la doctrina K preferían mirar el programa en diferido para no perderse el “fulbo”.

Ahora con el compañero Mauri estamos también en la misma, los que no queríamos otra “década ganada” no tuvimos más remedio que votarlo para evitar que ganara el compañero “mano dura” cuyo único mérito fue convencer al padre de que le comprara una lancha.

Nuestro presidente actual también proviene del “fulbo” cuando se alejó de Sevel (una de las empresas de su padre) se propuso como candidato a presidente de Boca y ganó.

Es muy edificante escuchar sus discursos comparando a la Argentina con un club de futbol y defender sus medidas haciendo un paralelo con su gestión como presidente de Boca, en su último viaje a Asia para buscar inversiones, en cada discurso hizo una mención al deporte de la pelota, en Kuwait, China e incluso en Japón.

 Si prendemos la televisión en todos los noticieros hay un capítulo para el “fulbo” del que morfan un montón de periodistas, que siempre tienen algún tema para discutir, algún jugador que defender o atacar o algún técnico para lo mismo.

Ojo yo no tengo nada contra los que le gusta jugar al futbol, es un deporte como cualquier otro y por lo tanto es sano y gratificante. Yo denomino pelotudo al personaje que con el argumento de que “a mí me gusta mucho el deporte” se la pasa sentado en el sillón del living morfando papas fritas y tomando cerveza, mientras mira en ESPN los partidos de la liga birmana.

El caso de las “barras bravas” merece un párrafo aparte, verdaderos empresarios de la extorsión se dan el lujo de apretar dirigentes, jugadores y alquilan su fuerza de choque a los políticos de turno.

Viajan al exterior como verdaderos embajadores, arman quilombo, los meten en cana y eso da tela para varias horas de comentarios en los medios. Estos delincuentes existen con la complicidad de los dirigentes, periodistas, jugadores y pelotudos.

En él mientras tanto la inflación no para, el gabinete es una bolsa de gatos, parece que se viene otro aumento de las naftas (será porque el ministro fue CEO de una petrolera) mientras se sigue diciendo que los precios pararan su escalada.

Esta todo bien, la selección tiene un nuevo técnico que trajimos de Europa, no se sabe bien a que costo, y en una de esas todavía nos podemos clasificar para el mundial de Rusia (si no si que sería una catástrofe nacional).

Realmente somos un país de pelotudos.

 

El Foyel, Patagonia 20 de mayo del 2017.

sábado, 6 de agosto de 2022

En Argentina la democracia fracasó.

 

Cuando en 1983 Alfonsín asumió el gobierno, luego de siete años de dictadura militar, dio un emocionante discurso.

“Con la democracia se come, se cura y se educa”, gritaba con su verborragia de político ante una multitud esperanzada que lo había votado.

El pueblo venía de soportar una autocracia que pensaba quedarse durante décadas, pero el fracaso de una guerra la obligó a irse con la cola entre las patas.

Pasaron 39 años y podemos hacer un balance de esa afirmación.

Con la democracia se come:  en 1983 había menos de un 10 % de pobres, indigentes menos del 2%, hoy la pobreza supera el 60%, los indigentes el 20% y asistimos al descorazonador espectáculo ve ver adultos y niños revolviendo la basura para buscar algo de comer.

Con la democracia se cura:  demos una recorrida por los hospitales públicos y comprobemos esta afirmación, también podemos preguntarles a los jubilados cuanto tarda en darle el PAMI un turno, aunque tengan una enfermedad oncológica. Veamos el auge de las empresas de medicinas prepagas, llamativamente la mayoría ligadas a entidades financieras, único refugio de los que pueden pagarlas para aspirar a una atención medica razonable.

Con la democracia se educa: en 1983 Argentina figuraba entre los primeros países por la calidad de su sistema educativo, los profesionales que se recibían en las universidades estatales eran buscados en todo el mundo (lo digo por experiencia propia). En la actualidad cada 100 alumnos que ingresan al nivel secundario se reciben menos de la mitad, y de esos menos del 20 % pueden comprender un texto y son incapaces de razonamientos matemáticos básicos, como la regla de tres simple. Yo recuerdo que cuando terminé la secundaria en una escuela estatal manejaba derivadas e integrales.

Si dejamos de lado la afirmación de nuestro estadista chascomuseño, padre del embajador plenipotenciario en España, y abordamos otros temas que hacen a la fortaleza y prestigio de un país, nos encontramos con las situaciones siguientes:

Defensa: En 1983 salíamos de una guerra contra la OTAN, a pesar de la pésima conducción de las máximas autoridades de ese momento, no podemos negar que el desempeño de nuestras FFAA fue remarcable. La fuerza aérea dio sobradas pruebas de profesionalismo y valentía, lo mismo que nuestras fuerzas terrestres. Argentina era respetada militarmente por sus países vecinos y muchos de nuestros oficiales daban cursos de entrenamiento en los mismos.

Hoy somos el país más indefenso de América Latina y cualquiera nos toca el culo, el incidente de los cinco aviones chilenos es una prueba más.

Seguridad y narcotráfico: Los que vivieron durante el gobierno militar recuerdan con nostalgia que nadie iba armado por la calle, salvo las fuerzas de seguridad. No faltará quien diga que eso era por causa de la represión antiterrorista y tienen razón, si te encontraban con un “fierro” ibas a parar al Rio de la Plata o a una fosa común, pero la realidad es que se podía andar a cualquier hora y no te mataban para robarte la billetera (en esa época no había celulares). Para tener en cuenta por quienes afirman que no hay relación entre cantidad de delitos y nivel de represión.

El narcotráfico prácticamente no existía, éste cobró volumen con el advenimiento de la democracia. cuando los políticos comenzaron a aceptar “aportes para campaña” de parte de estas mafias, poco a poco se fueron infiltrando como un cáncer en nuestra sociedad. así llegamos a la situación actual con muertos todos los días y nuestros jóvenes drogados y tirados en las calles de nuestra Patria. El narcotráfico no se puede afianzar en un país sin complicidad de la política y la justicia.

Corrupción gubernamental: Es verdad que durante el gobierno anterior a 1983 hubo casos de corrupción, por ejemplo, el del “edificio Partagás” construido por algunos líderes de la dictadura militar, para de esa forma quedarse con un departamento en el coqueto barrio de Palermo. Ahora bien, comparemos estos hechos con los casos de corrupción ocurridos en democracia, como con Ménem y nuestros gobernantes “nac & pop” del kirchnerismo.

Cultura del trabajo: Simple, antes de nuestra democracia no había planeros.

Patriotismo y soberanía: Los invito a asistir a cualquier acto patrio en una escuela pública y comprobaran que los alumnos (y en muchos casos los maestros) no cantan el Himno Nacional, entre otras causas porque no saben la letra. Permitimos que terroristas con la excusa de que son “originarios” tomen tierras, en muchos casos quemen nuestra bandera y enarbolen un trapo multicolor en su lugar y declamen que ese “territorio recuperado” no es más Argentina. pregúntenle a nuestros “hermanos chilenos” a quienes respetaban más si al gobierno militar o al democrático.

Valores en general: lo mas grave y triste de todo lo expuesto es que luego de 39 años de democracia se perdieron valores como la palabra, el honor, el mérito, el patriotismo, la superación mediante el esfuerzo, el trabajo, la familia. Esta degradación moral hace que todo valga con tal de “salvarse”, nuestra juventud ve que los políticos se enriquecen con la corrupción y optan o por corromperse ellos o irse del país.

¿De verdad piensan que esto se arregla votando?


                                                                                    El Foyel, 06.08.22